El airbag para motocicleta ya es obligatorio y así es como funciona el líder: probado

El airbag y la enseñanza nos demuestra que su obligatoriedad  es uno de los pilares sobre los que se cimenta la seguridad dirigida hacia el motorista.

La norma vigente se actualiza incorporando este elemento de protección para todos aquellos que pretendan obtener el carnet de moto, formando parte de la indumentaria necesaria dentro de las clases prácticas destinadas a tal fin.

Tanto el alumno como el profesor deben ir ataviados con un sistema de airbag que cumpla la certificación EN 1621-4. Es aquí donde una marca de largo raigambre en el mundo del equipamiento del motorista como Dainese cobra protagonismo, encontrando la mejor manera de exprimir un sistema  de funcionamiento complicado, pero de uso y mantenimiento extremadamente sencillos.

Dainese D-air Smart: airbag profesional de plena confianza

Dainese  lleva nada menos que seis décadas  dedicándose al cuidado del motorista, y como ejemplo encontramos en el desarrollo de su D-air Smart una buena forma de entenderlo sobre el terreno.

La tecnología aplicada al servicio del equipamiento motorista no solo proviene de largos años de intenso estudio, sino también se encuentra directamente vinculada a un extenso despliegue profesional dentro de las competiciones más relevantes.

Así, las sucesivas versiones de los sistemas airbag desarrollados y comercializados por Dainese son fruto de todo ello, destacando su aportación a los pilotos más destacados de MotoGP y WSBK  en sus diferentes categorías.

Con la comercialización del chaleco técnico Dainese D-air Smart, la marca italiana pretende poner sobre el terreno todo su saber hacer con un producto donde la tecnología desarrollada aporta absoluta confianza, sin olvidar un pesoreducido  o la ergonomía ideal para que no reste enteros al confort del usuario.

De hecho, esta prenda ideada específicamente para rodar sobre tierra y asfalto bajo la línea de desarrollo Dainese Smart Jacket, puede  emplearse tanto en contacto directo con el cuerpo, por  dentro de la chaqueta, como ajustada sobre el exterior  de la misma.

Precisamente para este fin encontramos zonas elásticas en los costados, asistidas a su vez por prácticas cremalleras que permiten pegar a la superficie de contacto (cuerpo o chaqueta) el chaleco Smart Air.

En un intento por ofrecer extras de utilidad que echarías en falta al ponerte el D-air sobre tu chaqueta técnica de moto, Dainese aporta un bolsillo vertical de amplia capacidad facilitando que tengas a mano objetos que necesites como llaves, mando del garaje, tarjeta de crédito para pagar en peajes, etc.

Todo parece indicar que tanto la seguridad como una perfecta adaptación al cuerpo se encuentran garantizadas en el Dainese D-air Smart. Para comprobarlo, nos lo enfundamos para rodar en moto realizando trayectos tanto urbanos como extraurbanos.

Antes de rodar, las primeras comprobaciones

Dainese protege sus productos incluso antes de que te lo lleves a casa mediante un sistema que impide la actuación del gas por causas externas. De modo que lo primero  que debemos hacer es conectar la toma de corriente al tanque donde se sitúa la bombona de gas.

Una vez resuelto, por cierto, con un acceso sencillo mediante cremallera perimetral y otra específica en el «centro de operaciones», será aquí mismo donde encontremos la toma USB-c con la que, como bien sabrás, obtendrás una carga más rápida y consistente mediante un enchufe estándar y el transformador de tu móvil; si lo haces por puerto USB a tu ordenador, por ejemplo, los tiempos se prolongan.

Con la carga al cien por cien de su batería de litio, capaz de ofrecer energíahasta 12 horas, solo queda ponerlo en marcha y, mediante la aplicación gratuita ofrecida por Dainese para IOS y Android (Dainese D-air), registrar el producto y ajustarlo a tus necesidades;  entre ellas, tu ámbito de conducción para establecer los tiempos de ejecución más adecuados: modo Racing a partir de 50 km/h o modo Road desde 10 km/h.

Ahora sí, ya podemos enfundárnoslo para salir a rodar. Primero lo hacemos con el Smart Air por dentro de la chaqueta, con la confianza de que  dará la cobertura propia de hasta 7 protectores estándar de nuestra prenda técnica habitual.

El clip que asegura el cierre superior de la cremallera será el que ponga en marcha el sistema de protección, con destellos y vibraciones iniciales que nos indicarán tanto el nivel de carga como el «OK» que nos confirma el hecho de que se encuentra preparado para ofrecernos la protección necesaria, en caso de necesitarla.

De este modo, el led  en color morado será el encargado de ello y, en cuanto iniciemos la marcha, su paso a color verde a la mínima velocidad detectada corroborará su correcta disposición y armado. En caso de que su sistema de giróscopos y la programación de su software detecte cualquier posibilidad de accidente del piloto, se activará automáticamente sin necesidad de anclaje a parte alguna de la moto.

El calor en pleno verano con temperaturas superiores a 30 grados ambientales son menos lesivos de lo que esperaba, incluso llevándolo por dentro en contacto directo con una camiseta técnica, si bien hay un pequeño «pero»…

Y es que incluso con un peso francamente contenido del conjunto, sin embargo dicho contacto directo con la espalda, sin forros intermedios, incide en tener bastante presente todo el sistema «pegado» al cuerpo, si bien encontramos zonas acolchadas con almohadillado extra para evitarlo en lo posible.

Lo cierto es que tampoco es una sensación desagradable ni insoportable que, todo hay que decirlo, tiene fácil solución: montarlo por fuera de la chaqueta, donde controlarás mejor el parpadeo del led que te indicará, entre otros detalles, el nivel de carga restante.

En cuanto a rodar bajo lluvia, por supuesto está preparado para ello, aunque entonces es más aconsejable portarlo bajo una prenda impermeable y protegerlo así todo lo posible, en especial para evitar el contacto de la batería con la humedad.

Ligero y plenamente eficaz

Sea como fuere, las sensaciones en plena marcha son las de cualquier otro día en moto, con la salvedad de hacerlo en esta ocasión con un sistema de airbag ligero y totalmente eficaz fundamentalmente en dorso y espalda. Hay que recordar también que la temperatura ambiental indicada por Dainese no debería ser superior a 40 grados centígrados, ni inferior a 0.

Su funcionamiento autónomo, de puesta en marcha automática, larga autonomía y confort general probado incluso con altas temperaturas de rodaje, nos lleva a pensar que ya no tiene mucho sentido rodar sin un elemento «360» como el Dainese D-air Smart.

Obligatorio en el ámbito de la enseñanza, sin duda resulta al tiempo imprescindible para el día a día donde ninguno de nosotros nos encontramos libres de sufrir un accidente de consecuencias incalculables… más contenidas sin duda asistido por un sistema airbag fiable como el que nos propone Dainese, por un PVP de 649 euros.