Clásicas Españolas

Seguramente uno de los apellidos más grandes de nuestra industria de la moto es el de Rabasa. La familia que fundó y dirigió los destinos de Derbi acaba de perder a uno de sus pilares: Andreu Rabasa. 

Pocos rallys tienen el éxito del Nacional Pre 60, una prueba que alcanza ya su 5ª edición, cada vez con más inscritos y mejores motos. Así disfrutaron sus participantes en esta temporada 2022.  

¿Fútbol en moto? ¿Eso ha existido? Pues no sólo existió, sino que sigue existiendo y en algunos países europeos es una de las modalidades del deporte en moto con mayor éxito. En España se intentó, allá por los años 80, por supuesto con motos españolas. No triunfó, pero dejó recuerdos tan curiosos como estas motos.

Modelos como las A45, B46/49, Brío o Impala apuntalaron el éxito de Montesa como fabricante de motos, pero hubo otros proyectos que fracasaron estrepitosamente o, ni siquiera, llegaron a ver la luz.

El sector industrial español durante el siglo XX estuvo sometido a muchos vaivenes; aún así hubo unos cuantos pioneros que, con grandes dosis de ingenio, idearon motos de lo más interesante, aunque algunas no llegaran a ver la luz.

El motociclismo español ha tocado techo. O quizá lo tocó hace tiempo, depende de cómo lo quieras ver, porque hace años que los españoles dominan todas las cilindradas. Y también aquí se han construido motos ganadoras. Ahora una moto española llega a MotoGP, aunque con matices.

A finales de los años 50 Montesa es ya una de las principales marcas de motos del país. Lube todavía mantiene su posición de líder, pero ya ve acercarse a la competencia desde Barcelona, con Montesa junto a Derbi, OSSA y otras que pronto desaparecerán, como la madrileña Roa. Dos eventos conformarán el futuro de la marca.

De las grandes marcas españolas, OSSA ha quedado en la historia como la tercera en discordia. Una marca quizá menos conocida en sus éxitos, con una gama menos amplia que sus competidoras, pero sin duda tan interesante o más que sus rivales.

A mediados de los 70 Montesa había centrado todos sus esfuerzos en las motos de campo, pero ante el crecimiento de la competencia en el segmento de las motos de carretera, surgió la necesidad de «volver al asfalto».