Una motocicleta roja está siendo lavada con una hidrolavadora mientras una mujer sonriente con gafas y snorkel aparece en primer plano
ACTUALIDAD

Puedes romper tu motocicleta cuando la laves: ten cuidado con esto

Cuando la suciedad se incrusta en nuestra motocicleta o scooter, a veces nos ensañamos con la pistola de agua a presión.

La actividad de  lavar la moto solemos dejarla siempre para luego, pero no por ello debemos hacerlo de cualquier manera... y a cualquier precio.

Cuando la suciedad no sale y nos empeñamos en acercar la pistola con agua a presión justo en la "zona cero", no somos conscientes de lo que hacemos.

Precios, ofertas, fichas técnicas e imágenes de TODOS LOS MODELOS DE MOTOS Y SCOOTERS del mercado 

Un exceso de empeño hasta el punto de ser agresivos con las piezas de tu moto, podría acarrear muy nocivas consecuencias.

Motocicleta siendo lavada con un chorro de agua a presión bajo la luz del sol
Atención al típico lavado con pistola a presión. | FM

Para evitarlo, ten en cuenta los siguientes pasos llegado el momento de ponerte manos a la obra en la limpieza de tu compañera de fatigas. Ella lo agradecerá, seguro.

1. Evita el agua a presión siempre que puedas

Cierto es que se trata de lo primero que pensamos cuando la moto o scooter lleva ya tiempo sin que le caiga una gota encima...

Persona lavando una motocicleta negra con una esponja y espuma
Lo mejor: paciencia, cariño, agua y jabón. | FM

La suciedad  en estos casos queda incrustada  de tal forma que "nos obliga" a tirar de pistola de agua a presión.

Pues bien, esta nunca será la mejor opción, salvo que no tengas otra manera de "meterle mano" como se debe: con tiempo y paciencia.

La pintura irá quemándose poco a poco por efecto de la misma presión del agua, azotando la superficie de sus piezas.

Tablero digital de motocicleta mostrando información como velocidad, marcha, nivel de combustible, temperatura y hora
Si el agua se cuela por elementos eléctricos, mal asunto. | Kawasaki

Pero además, el agua podrá colarse por zonas muy sensibles, a saber: tubo de escape, instrumentación, piñas o diferentes partes del cableado con sus contactos.

2. Lo mejor: el modo tradicional

El modo tradicional del lavado de una moto consiste en tirar de  cubo lleno de agua con solución jabonosa, sin más.

Antes, pásale a la moto un manguerazo para "preparar el terreno" y evitar, entre otros daños, los arañazos de unas piezas cubiertas de mugre.

Persona lavando una motocicleta negra con una esponja y jabón
El método tradicional siempre será el mejor remedio. | FM

Solo queda armarte de una esponja suave, nunca rugoso para, formando círculos, aplicar a demanda el agua jabonosa por todas las partes que lo requieran.

3. Secado "manual o a máquina"

Una vez "rebozada", aclara toda tu moto para retirar el agua con jabón aplicado anteriormente... sin presión a ser posible.

Hay quien gusta de secar la moto entera con aire a presión, si bien esto no siempre resulta tan eficaz e "inocente" como parece.

Piensa que tirando aire a chorros en las piñas del manillar, el mismo agua que quieres retirar se puede colar hacia los contactos interiores.

Manillar de motocicleta con varios botones de control y símbolos para luces y direccionales
Ojo con los mandos de las piñas. | QJ Motor

Con ello crearás capas de óxido y, por ende, futuras conexiones fallidas. ¿Qué tal dejar la moto en la pata lateral  mientras escurre todo el agua sobrante?

Por supuesto, le puedes ayudar con un paño suave de los que usas para limpar los cristales de casa. El resultado final brillará con luz propia.

Persona limpiando el tanque de una motocicleta roja con un trapo azul
Repaso final: secado y posterior limpieza y lubricación de la cadena. | FM

Y si tu moto tiene transmisión por cadena, ojo, porque el agua atacará los eslabones por muy protegidos que estén. Limpia y engrasa como acto de fin de fiesta y tendrás listo el kit de transmisión para un buen puñado de kilómetros... como el resto de tu moto.

➡️ Actualidad

Más noticias: